Un proyecto cuyo objetivo ha sido preservar la esencia original del apartamento diseñado por los arquitectos
Oscar Tusquets y Lluís Clotet, utilizando materiales naturales, sencillos pero nobles, como las baldosas de los baños y el pavimento con cerámica natural tipo rasilla.
La arquitecta redistribuye los espacios para que el usuario tenga la total libertad en su nuevo uso.
Una rehabilitación con nuevos cerramientos en madera de altas prestaciones en aislamiento y eficiencia energética, junto a una estudiada ventilación y protección solar, para reducir el consumo energético con sistemas pasivos.
Maria ha elegido el pino por ser la madera original de la casa.
El pino tiene la superficie más adecuada para lacar la madera, en este caso sólo en el exterior en color verde.
En el interior, la madera de pino ha sido protegida con un tinte que trasmite su máxima expresión en su veteado y tacto natural.
El sistema de cerramiento para la planta baja ha sido la corredera plegable en acordeón.
Es el sistema que con las puertas abiertas y plegadas en la pared, permite la máxima amplitud entre el exterior e interior. Un sistema que eleva las prestaciones de aislamiento térmico y seguridad, con montaje de vidrios bajos emisivos.
Para optimizar la máxima ventilación cruzada, durante todo el año,
se han instalado en la planta superior ventanas practicables oscilobatientes.
El confort natural y el ahorro energético han sido las principales premisas de la arquitecta.
En la fachada con más exposición al sol, se han instalado protecciones solares, sin olvidar de la agradable chimenea de leña que dibuja el eje de la casa, en un espacio de calidez y bienestar.
Arquitectura:
Maria Pujol Nadal
Fotografía:
Delfina Gronda